domingo, 6 de enero de 2008

Reyes Magos


Los Reyes Magos tienen que dar ejemplo. ¿Cuántos niños/as esperaban con sus caritas ilusionados, nerviosos, expectantes, la presencia de Reyes y cortejo?. Espero que su inocencia infantil sólo tuviera ojos para lo mágico del momento y del día, pasando por alto lo que muchos mayores pudimos ver. No era un carnaval, ni una romería, ni una noche de copas, es la fiesta más especial de pequeños/as, y eso se les olvidó a algunos/as beduinos/as, que a ritmo de cubatita compaginaban la entrega de regalitos con el aliento a alcohol que desprendían al acercarte a ellos. Y con cigarros en mano, en cualquier momento del trayecto dentro de la cabalgata.

Es de agradecer quienes colaboran y hacen posible para que este día siga siendo lo que es, una fantasía hecha realidad, un cúmulo de sensaciones y emociones infantiles, pero será necesario recordar a quienes tienen un concepto distinto, que no es el mejor momento para dar riendas sueltas a otros menesteres.

P.D. Fue el Día de los Reyes Magos pero es labor de todos/as que esa magia siga siendo el elemento fundamental del gran día de los pequeños y pequeñas.












miércoles, 2 de enero de 2008

PROPÓSITOS 2008




En la puerta de casa, en la parte interior, quien ha estado lo sabe, tengo colgado una lista de propósitos para el año, idea de mi hermana Maribelita. Eso me permite cada mañana recordarlas y poder cumplirlas. Cierto es que hace varios años las sigo prorrogando porque me parecen de lo más acertadas, así que quiero compartirlas por si podeis beneficiaros de ellas igual que yo.
No es una lista cerrada, desde luego, pero son cosas muy elementales que hacen que mi día a día sean mucho mejor. Ahí los llevais:
SER POSITIVO
SER MAS TOLERANTE
NO PROTESTAR INNECESARIAMENTE
TENER PACIENCIA
PENSAR UN POCO EN MI
NADA DE NEGATIVAS
INTENTAR SER FELIZ CON TODO
NO CRITICAR
DISFRUTAR DE CADA MOMENTO
ESTAR BIEN CONMIGO MISMO
VALORAR LO QUE TENGO Y ME RODEA
QUERER LA VIDA
HACER FELIZ A LOS QUE ME RODEAN

P.D. Recordad que somos nosotros mismos los artífices de nuestra propia felicidad.