domingo, 2 de enero de 2011

BIENVENIDO 2011.


Había una vez un animalito que al ritmo que paseaba pensaba. Nunca fue el primero: No cuando nació, porque delante de él nacieron otros tantos hermanos. No cuando fue al colegio, porque los demás animales tenían paso ligero y cuando él llegaba, la clase estaba terminada, y cuando tuvo edad de rodearse de amigos, su lentitud en pensamiento hacía que se percatase tarde de cual era su lugar y finalmente para no sufrir al descubrir que nunca llegaría antes de, ni sería el primero de, decidió hacer de su lentitud una virtud. Y así el caracol se hizo caracol, tranquilo en sus movimientos, en sus pensamientos y cuando se sentía amenazado o cansado, su concha, el mejor lugar hasta que pasase la tormenta.


p.d. Vivan los caracoles.