Si naciste en Abril, en feria de Sevilla.
Si tu padre te llevaba cada día desde que se empezaban a montar las estructuras, se abrían los farolillos, se colocaban las sillas y se regaba el albero.
Si tu madre te vestía de flamenca con todos los detalles de la indumentaria y aunque sólo volviese el traje, cada día se repetía el proceso.
Si subías al gusano loco con el cocinero de la caseta cuando aún estaba de prueba la atracción.
Cómo piensas que no se te ilumine la cara cuando llega el mes de abril y por mis venas fluyen las letras de cada sevillana y el recuerdo de cada momento especial vivido desde mi mes de nacimiento.
Por eso es intocable y sagrado, y como dice la canción: TODOS LOS DÍAS DEL AÑO YO SOY FELIZ CON MI GENTE, PERO CUANDO LLEGA ABRIL ME VA CAMBIANDO EL AMBIENTE.
