miércoles, 18 de mayo de 2011

VAMOS A CONTAR MENTIRAS




Me encantaba aquella canción que decía: por el mar corren las liebres, por el monte las sardinas, y nunca pensé que fuera más que una canción infantil y que el día a día no permita que se olvide.


Al ruido de las nueces salió el amo del peral, y tras tanto tiempo de oír nueces y comer peras, ha perdido las ganas de salir cuando oyen que están tirando piedras y ya no repite a los mismos que no es suyo el melonar.


El pobre hombre ha decidido quedarse en casa, hacer oído sordo a tanta falsa alarma y dejar que sea la inercia de la vida la que lleve su peral a buen término.


Nunca tendrá la certeza de cual fue en realidad la causa de la mejora de sus tierras, pero desde luego claro tenía que ni las liebres, ni las sardinas, ni las nueces, ni las peras, serían la causa de ello.



p.d. Era más que una canción, triste canción.