miércoles, 30 de noviembre de 2011

MIRINA Y EL BOSQUE ENCANTADO.



Mirina salió en bicicleta una mañana, se dirigió hacia el bosque advertido, porque era un día claro, soleado y apetecible para ello. Adentrose más de lo imaginado disfrutando del paisaje, y cuando quiso darse cuenta los caminos se habían entrelazado de tal manera que resultaba complicado acertar la vuelta. Intentó en repetidas ocasiones dilucidar la solución al laberinto creado, e intentó reflexionar sobre los trayectos recorridos. El paseo ocioso y bienintencionado se había convertido en un dilema existencial. Es el camino o no lo es? Esa es la cuestión.

Pero Mirina, pensó que si seguía hacia delante, cada vez sería más complicado encontrar una salida, y decidió volver sobre sus pasos, y retrocedió hasta el comienzo, y sin embargo esa vuelta atrás fue un paso avanzado.

Puso fin a su paseo y ese fue el inicio de la ruta acertada.


p.d. El cuento de siempre jamás. Ayyyy es un cuentoooooo.