jueves, 2 de febrero de 2012

QUE ME HE LIAO,QUE ME HE LIAO.

Decidió ir de paseo a la capital y notó grandes cambios en cuanto a la señalización para la conducción. Muchos carriles de sentido reverso, muchos otros solo para bus y taxis, otros solo para bicis, cuidado con el metro, en los semáforos grandes letras de cine anunciando, motos, bus, y todo a la vez se le hizo un mundo complicado. Ello provocó que fuese llamado a la atención por los cuerpos pertinentes, quienes le informaron de haber conducido por un carril de transportes público durante varios minutos, pisado el espacio reservado a las motos en un semáforo, y no detenerse ante el canario del carril verde.

Pobre él, con su cara de asombro, escuchó la reprimenda de los agentes, y a la pregunta de por qué lo había hecho, no pudo decir otra cosa que: ME HE LIAO, QUE ME LIAO.

De esta forma, dio media vuelta y respiró más tranquilo cuando de la voz de su Lola salieron las palabras HA LLEGADO A SU DESTINO.
P.D. Desde entonces coge un naranjita en los arcos.